Desde La Besurta
Clásica ascensión a La Maladeta por la Canal de la Rimaya desde La Besurta, con nieve muy pesada y raquetas casi desde La Renclusa.
Fecha de la actividad: sábado,8 de mayo de 2021
Lugar de salida: La Besurta (1890 m)
Objetivo: La Maladeta (3309 m)
Desnivel positivo acumulado: 1420 metros
Distancia y tiempo empleado: 11,8 km en 8h20′
Archivo GPS (con el recorrido, click para descargar): TrackGPS
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La Ruta
Subimos a dormir a Benasque, como hicimos hace dos años para subir al Aneto por la Canal Estasén (click para ver) haremos noche en la Escuela de Alta Montaña. De nuevo muy bien; Media Pensión (30€), cena caliente (lasaña de verduras y carne estofada con champiñones, postre buffet), desayuno buffet y aforo al 50% por la Covid19. ¡Estuvimos los 4 solos en toda la Escuela!
Tras la cena, nos acercamos a Benasque a tomar una cerveza, volvemos pronto y nos acostamos, el despertador va a sonar a las 4:30 h. Bajamos a desayunar, nos montamos en el coche y subimos por la carretera a La Besurta.
Nos encontramos la zona repleta de coches, y terminamos de preparar las mochilas,
Salimos de La Besurta, tomamos el camino de Aigualluts y La Renclusa, ahora marcado como GR-11.5, y que comparte itinerario con las balizas verdes del S-14.
Al poco de empezar a caminar comienzan a aparecer las primera manchas de nieve. Poco antes del Refugio de La Renclusa, Félix nos dice que se nota flojo, que igual nos acompaña hasta el refugio y se da la vuelta, le animamos pero no se ve con fuerzas y cree que nos condicionará en la jornada.
Llegamos al refugio y Félix nos confirma que se bajará de vuelta al coche, no hay forma de convencerlo.
Continuamos, bajamos al cauce del torrente y tras atravesarlo, la nieve es contínua, al poco nos calzaremos los crampones. En el cambio de la nieve marrón (producto de la calima africana) a la nieve más blanca de la semana anterior, se nota como nos hundimos bastante más, tanto que al rato, ya reventado, decido ponerme las raquetas. No se nota mucho, pero algo es algo.
Poco a poco vamos ganando altitud, llegaremos al desvío del Portillón para ir al Aneto, aquí se desvía el 70% de la gente. Nosotros seguiremos acercándonos a la base de La Maladeta. La persistente nube que se haya sobre la zona de La Maladeta desde que hemos salido del coche nos hace dudar de tener algún tipo de vista una vez en la cima, según nos acercamos vemos que las nubes se mueven con gran velocidad justo sobre la cima de La Maladeta.
Alcanzamos la base de la Canal de la Rimaya, vemos como es habitual, esquíes clavados en la nieve y un numeroso grupo de montañeros descendiendo la canal, sobre ellos un par de esquiadores esperando para bajar.
Nosotros comemos algo, esperando que bajen todos y así subir con seguridad.
Tras ver como bajan los esquiadores, no vamos para arriba, la canal, con innumerables huellas no pasa de los 50º, se sube bien.
Una vez arriba, tan solo queda una amplia loma hasta la cima, eso si, azotada por un fortísimo viento, en el momento que salimos de la canal el cambio es brutal.
Poco a poco, la persistente nube da paso a algún intermitente claro, en un corto instante llegamos a ver el helado Ibón de Cregüeña, poco a poco, zarandeados por el viento, remontamos la loma hasta alcanzar la cima, en otro pequeño hueco entre las nubes alcanzamos a ver el glaciar del Aneto, incluso vemos a un numeroso grupo caminando por él.
Nos hacemos las fotos de cima y para abajo. Alcanzamos rápidamente la parte de arriba de la Canal de la Rimaya, esperamos a que termine de subir un grupo numeroso de catalanes (por lo visto, ya desconfinados) y bajamos con cuidado, primero de cara a la pendiente y al alcanzar el cono de deyección ya pendiente abajo.
Nos tomamos un rato de descanso, aprovechamos a comer ya que se ha despejado casi por completo y al sol se está de maravilla.
Reemprendemos la marcha, la nieve está mucho más pesada que en el ascenso, vamos los tres con las raquetas, aún así cuesta bastante esfuerzo bajar.
No obstante, los metros se suceden rápidamente, pronto tenemos a la vista el refugio de La Renclusa.
Vamos siguiendo una línea imaginaria lo más recta posible, para que el recorrido sea lo más corto posible. Al final iremos a ganar el itinerario de ascenso y desde allí bajaremos al torrente.
Me quito las raquetas y caminando alcanzamos la zona del refugio donde aprovechamos para comer algo, antes de bajar a La Besurta donde nos reencontraremos con Félix que ha aprovechado la jornada, casi tanto como nosotros; desde La Renclusa ha subido a los ibones de Paderna. Y una vez, de vuelta en La Besurta se ha acercado a Aigualluts.
Han subido a abrir el bar de La Besurta, nos tomamos una cerveza para celebrar la jornada montañera y nos preparamos para la larga vuelta, entre bajar a Benasque (pararemos a visitar el Cromlech del aparcamiento de Hospital) y la “vuelta panorámica” a la que nos obligan las obras de la N260 a la altura de Campo, nos lleva casi 4 horas llegar a Zaragoza.
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