Dormimos en la zona de acampada de San Nicolás de Bujaruelo, el viento casi se nos lleva la tienda con nosotros dentro, ¡vaya nochecita! Al levantarnos vemos que el día parece malo malo, así que decidimos cambiar de planes, y dejar los Gabietos para mejor ocasión. ¿Dónde vamos? por que no probamos en el Sobrepuerto, igual por el Pelopín no hace tan malo.
Y así fue, según empezamos a bajar, la meteo mejoró exponencialmente, al llegar a Torla, el cielo era azul y el sol radiante, eso si, por encima del Mondarruego había un marrón increible.
Yo ya había subido al Pelopín otro día de mal tiempo, del que tampoco se libró esta zona, hacía tan malo, que a la cima del Pelopín llegamos gracias al GPS, empapados y no se veía más allá de unos metros. Así que no tenía ni idea de cuan largo se hacía el itinerario hasta la cima del Manchoya.
El itinerario es sencillo, cómodo y hasta aburrido, pero las vistas y la soledad del paraje merecen la pena.
Salimos desde el aparcamiento por un senderito que va a pasar por encima de la boca del túnel del Cotefablo.
El sendero que, por encima de la boca del túnel, nos enlazará con la pista.
Sube rápido hasta cruzar una pista muy bien cuidada (para ir en BTT tiene que ser una gozada), tras cruzar la pista el sendero sigue igual hasta llegar al amplio collado de Cotefablo. Desde allí el itinerario gira a nuestra izquierda, ya por pista vieja.
Ya en la pista, vemos el Pelopín a nuestra izquierda.
Se sigue igual hasta llegar al collado de Otal, entre el Pelopín y Peña Ronata.
Subimos al Pelopín y ya por la amplia loma cimera seguimos hasta un collado por donde se puede bajar al pueblo de Otal, a nuestra derecha, o a Yosa a nuestras izquierda. Enfrente tenemos una cima con un gran hito cimero, Pico del Pilón, son como 3 metros de piedras muy bien puestos (¡vaya entretenimiento!).
Camino a nuestra segunda cima, tras ella a la izquerda el Manchoya, lejos, muy lejos.
Seguimos por la loma, hasta ganar de nuevo la pista que pasando por dos elevaciones menos importantes, el Tozal de Metils y el Tozal de la Virgen nos deja en la cima del Manchoya.
En la cima del Manchoya.
Después de un buen rato en la cima, pues hacia un mediodía estupendo y las vista del Pirineo, ahora ya despejado, eran estupendas, nos decidimos a bajar, desandando todo el itinerario que se hace largo.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.
Cookies estrictamente necesarias
Las cookies estrictamente necesarias tiene que activarse siempre para que podamos guardar tus preferencias de ajustes de cookies.
Si desactivas esta cookie no podremos guardar tus preferencias. Esto significa que cada vez que visites esta web tendrás que activar o desactivar las cookies de nuevo.
Deja un comentario